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El Barça afronta una revolución en su plantilla tras la gira por Estados Unidos.
La gira norteamericana del FC Barcelona ha servido como un intenso periodo de evaluación para el nuevo entrenador, Hansi Flick. Con un plantel numeroso y la necesidad de cumplir con el fair play financiero, el club catalán se enfrenta a un mercado de fichajes vertiginoso en el que deberá tomar decisiones cruciales sobre el futuro de muchos jugadores.
Los intocables y los señalados
Eric García se ha consolidado como un fijo en los planes de Flick gracias a su versatilidad. Sin embargo, jugadores como Íñigo Martínez, a pesar de su calidad, podrían salir debido a su alto salario. Julián Araujo y Clément Lenglet parecen destinados a abandonar el club, mientras que Héctor Bellerín y Mika Faye podrían seguir si no llegan ofertas interesantes.
Álex Valle ha sorprendido gratamente, pero su continuidad dependerá de si el Barça logra renovar su contrato y rechazar las ofertas de otros equipos. Pablo Torre, por su parte, ha resurgido y podría quedarse si se producen salidas en la zona ofensiva.
Dudas en la zona de ataque
Ilkay Gündogan y Raphinha, pese a su deseo de continuar, podrían ser sacrificados para reducir la masa salarial. La llegada de Dani Olmo y la necesidad de inscribir a Vitor Roque, cuyo fichaje ha sido muy costoso, complican la situación en la delantera.
El futuro de los jóvenes
Pau Víctor ha aprovechado su oportunidad y tiene muchas posibilidades de quedarse en el primer equipo. En cambio, Vitor Roque deberá encontrar una solución que le permita jugar con regularidad, ya sea en el Barça o en otro club.
Un mercado de fichajes frenético
Deco y Hansi Flick tienen por delante un trabajo titánico para conformar una plantilla competitiva y equilibrada. Las próximas semanas serán decisivas para conocer el futuro de muchos jugadores y para definir el proyecto deportivo del FC Barcelona.
