El Real Madrid atraviesa una de sus peores crisis defensivas en años. La salida de Nacho, la reciente lesión de Militao y el fracaso en el fichaje de Yoro han dejado al equipo blanco con una defensa mermada y en constante riesgo.
La planificación del Real Madrid para reforzar el centro de la defensa se ha visto marcada por una serie de contratiempos que han dejado al equipo en una situación límite. La salida inesperada de Nacho Fernández, capitán del equipo y pieza fundamental en la defensa, fue un duro golpe para Ancelotti. A esto se sumó la reciente lesión de Eder Militao en Brasil, siendo así una baja inesperada en el regreso de la fecha FIFA.
La Casa Blanca intentó prevenir esta situación con el fichaje de Axel Disasi, pero el jugador francés finalmente optó por fichar por el Chelsea.
La siguiente opción fue Leny Yoro, un joven central francés con un gran proyección, pero el Manchester United se cruzó en su camino y se llevó al jugador.
Ante la imposibilidad de fichar un central de garantías, el Real Madrid decidió apostar por la cantera. Joan Martínez, un joven central de 17 años, destacó en la pretemporada y parecía llamado a ser el relevo generacional de Sergio Ramos. Sin embargo, una grave lesión le ha apartado de los terrenos de juego durante varios meses.
La única esperanza para Ancelotti es la recuperación de David Alaba. El austriaco se lesionó a finales de la temporada pasada y su regreso se ha retrasado más de lo previsto. El cuerpo técnico espera que el central pueda volver a las canchas lo antes posible para reforzar la defensa.
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